Audi e-tron, el amperio contraataca

Audi e-tron, el amperio contraataca
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Y Audi dijo “Yes, we can” y han sacado un prototipo de coche eléctrico. Audi no ha apostado directamente por el coche eléctrico durante años, aunque intentaron comercializar a lo largo de los años 90 los primeros híbridos modernos. Ahora traen a Fráncfort el interesante Audi e-tron.

Es un deportivo biplaza de dimensiones más contenidas que el Audi R8, pues mide 4,26 m de largo, 1,90 m de ancho y 1,23 m de alto. Sólo tiene propulsión eléctrica y es recargable mediante la red eléctrica exclusivamente. No se ha hablado de momento en llevarlo a la producción.

La marca nos habla de un coche para disfrutar mucho aunque no tenga “sonido” como tal, y quitando ese pequeño detalle puede ser más divertido que sus obsoletos rivales con motores a combustibles fósiles y pesados sistemas mecánicos e hidráulicos. Veamos por qué.

Audi e-tron

El deportivo eléctrico de Audi

Tiene cuatro motores, uno por rueda (no van integrados), que generan 313 CV y 450 Nm de par (Audi dice 4.500 Nm, debe ser un error). Es un auténtico tracción total a pesar de que cada rueda es independiente de las demás. La fuerza se distribuye electrónicamente y con una rapidez impresionante.

El talón de Aquiles de los eléctricos son sus baterías. Audi dice que el e-tron puede hacer 248 km en ciclo de conducción normal mixto (NEFZ). Los acumuladores energéticos añaden 470 kg al conjunto, pero como el e-tron es muy ligero de construcción mediante el uso de aluminio y fibras pesa sólo 1.600 kg (menos que el R8).

Acelera a 100 km/h en 4,8 segundos, recupera de 60 a 120 km/h en 4,1 segundos y no pasa de 200 km/h para que no se degrade el rendimiento. Puede recuperar energía en las frenadas, si no son necesarios los frenos convencionales no se usarán, y ya usa el frenado por cable (brake by wire) en el eje trasero.

Audi e-tron

El eje delantero tiene suspensión independiente de brazos triangulares dobles, detrás tiene paralelogramo deformable en aluminio. Los neumáticos elegidos son 235/35 R19 en el eje delantero y 295/30 R19 en el posterior. Su fuerza de aceleración y motricidad no va en contra del confort según la marca.

El reparto de peso es 42:58, las baterías se ubica donde iría un motor central. Fundamentalmente se comporta como un propulsión ya que el 70% de la fuerza va al “eje” trasero. Como la fuerza se distribuye dinámicamente su velocidad de paso por curva promete ser espectacular y además muy segura.

La aerodinámica es también importante, por eso sólo abre sus tomas de aire cuando es necesario y no tiene espejos retrovisores. Unas cámaras con pantallas interiores los reemplazan. En los coches eléctricos es vital el asegurar una aerodinámica impoluta ya que cada kilómetro de autonomía cuenta.

Audi e-tron

También el rendimiento térmico ha sido estudiado. El circuito de refrigeración atiende tanto a las baterías como a los pasajeros, y para la calefacción se usa una bomba de calor (un A/C a la inversa), una solución más eficiente que las empleadas en los eléctricos de producción actuales.

El tiempo de recarga en casa es de 6-8 horas, pero mediante una toma de alto voltaje el tiempo se reduce a 2,5 horas. Si el coche está enchufado puede usar una función de climatización previa a la entrada de pasajeros, y Audi trabaja en la recarga sin cables para un futuro próximo.

Tecnología para el interior y la vida diaria

El Audi e-tron propone la comunicación entre otros vehículos e infraestructuras (Car To X) para obtener valiosa información de cara a una conducción eficiente, como los tiempos de apertura de los semáforos, si hay algún accidente/atasco, puntos de mayor congestión, etc. Todo irá coordinado con el navegador GPS.

Audi e-tron

Para el salpicadero se ha procurado eliminar todos los botones posibles y utilizar la técnica de pulsadores inteligentes que usan los teléfonos móviles de última generación. La integración del nuevo MMI en el salpicadero está orientada al 100% al conductor para simplificarle la vida.

Los faros de diodos luminosos no solo ahorran energía, también se adaptan a la climatología, condiciones de luz y trazado (por cartografía) para iluminar de una forma o de otra. Se dice adiós a los faros antiniebla, pues puede emular sus funciones evitando su alto consumo energético, casi todo es automático.

En el futuro, estas soluciones formarán parte de serie en todos (o casi todos) los coches, avanzando hacia los coches que sean capaces de conducir de forma totalmente autónoma (¿el fin del Taxi?), mejorando la movilidad, reduciendo la contaminación y los accidentes de tráfico. Deseo envejecer para verlo.

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