Las conversiones de coches con motor de combustión en eléctricos es una afición muy extendida en otros continentes, como el norteamericano, donde forma parte de la cultura y ha facilitado la entrada de los primeros coches eléctricos que los ha convertido en un éxito comercial. Pero también en lugares como Australia de donde nos llega esta interesante historia.
En el país de los koalas, dos locos de los coches eléctricos se han propuesto demostrar que este tipo de motores están más que listos para satisfacer nuestras necesidades de movilidad, y para demostrarlo han cruzado todo el país en un épico viaje de más de 6.000 kilómetros de distancia a los mandos de un MG de 1956 al que han sustituido su viejo motor de gasolina y siendo sustituido por un sencillo y efectivo motor eléctrico.
Según los protagonistas, solamente se han encontrado con problemas en lugares remotos donde ha sido algo complicado encontrar un lugar donde recargar sus baterías y donde han tenido que usar generadores, pero el resto de trayecto lo han realizado sin ninguna clase de problema mecánico, un logro en un país conocido por sus extremos climáticos.
En total la inversión realizada en la conversión ha ascendido a unos 25.000 dólares, una cifra nada económica, a cambio de la que disponen de una autonomía de unos 260 kilómetros con cada carga, y al menos 350.000 kilómetros de conducción sin emisiones y con mucho estilo.
Vía | ABC Tropical North
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