Parece que poco a poco los fabricantes van desvelando sus cartas más inmediatas para algunos de los modelos eléctricos de referencia en diferentes mercados. Los planes para el Volkswagen e-Golf o Golf eléctrico llegan mucho más tarde que, por ejemplo, para el Nissan LEAF, modelo con el que los alemanes quieren hacer competir al 100% eléctrico.
En algunos mercados, como el noruego, sus ventas estánn funcionando bastante bien, pero todo indica que las intenciones de Volkswagen van dirigidas a otros mercados clave, como el de Estados Unidos. De ahí que en verano anunciaran una reducción en su precio para igualarlo con el del Nissan LEAF, y lo que conocemos hoy, que la próxima versión de 2017 del Volkswagen e-Golf contará con nuevas baterías, lo que le proporcionará más autonomía.
En concreto desde el fabricante hablan de alcanzar los 174 kilómetros bajo ciclo de homologación EPA, algo que ciclo NEDC le haría superar muy posiblemente los 200 kilómetros. Muchos entienden esto como la respuesta a la versión de 30 kWh del LEAF, algo que le proporciona al eléctrico nipón 172 kilómetros de autonomía EPA.
Visto así, parece que los alemanes llegan tarde, pese al crecimiento que el Golf eléctrico, por su cuenta y riesgo, poco a poco ha ido experimentando en los últimos tiempo. La decisión de Volkswagen es más una respuesta a una tendencia más general de la industria antes del salto a la tan llamada nueva generación de eléctricos. Por ejemplo, BMW hará lo propio, y posiblemente antes, con el BMW i3, con un aumento anunciado de la autonomía en consonancia de en torno al 25%.
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