El Reino Unido ha aprobado un plan para renovar las flotas que prestan servicios al Gobierno con vehículos eléctricos. Con esta medida, las autoridades pretenden fomentar la movilidad eléctrica haciendo que sus propios medios de transporte se electrifiquen.
Mientras la medida todavía se encuentra por concretar, y no se sabe si serán coches eléctricos 100% o incluirán también a otros modelos enchufables como los híbridos de este tipo, lo que si es seguro es el presupuesto de este plan de renovación: 5 millones de libras, o lo que viene a ser lo mismo, 6,32 millones de euros. Dentro de esta partida, también se incluye la puesta en marcha de una infraestructura de recarga que dé soporte.
Es curioso, porque después de la polémica que vivió Tesla Motors en Reino Unido con la red de la compañía energética Ecotricity, y que Elon Musk trató de limpiar posteriormente, ahora el mismo fabricante de coches eléctricos ha salido al paso anunciando, como no podría ser de otro modo, su alegría por semejante noticia, lo que ha dado a pensar a muchos que el Gobierno ya se habría puesto en contacto con los de Silycon Valley.
En cierto modo, si lo pensamos, en lo que se refiere al transporte oficial de autoridades quizá el ejemplo sea demasiado "ejemplar" (permitidme la redundancia, en este caso es necesaria) si vemos a un ministro inglés siendo conducido en un Nissan LEAF. En este caso, el Tesla Model S cobraría más sentido, al menos para ellos. De cualquier modo, no dejaría de llamar la atención del mundo que los ministros se movieran en Model S.
El primer paso será la introducción de 150 nuevos vehículos eléctricos, a los que les acompañarán otras 135 unidades más tarde. La verdad es que esta medida puede traer cierta coherencia al discurso del coche eléctrico proveniente de las autoridades: no vale demasiado convencer a la población de que se ha de mover en vehículos con bajas emisiones, si nuestros propios políticos no lo hacen.
Vía | Clean Technica
Imagen | Elbilforeningen (CC) en Flickr
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