Ya en los años 60 del pasado siglo en Turquía se plantearon desarrollar una marca propia de coches. De la marca Devrim, que significa Revolución en turco, pero tan solo se construyeron cuatro prototipos, tres de los cuales fueron destruidos y el cuarto aún se conserva. La marca nunca llegó a producir más coches, alegando escasa demanda en aquellos momentos.
Ahora Turquía desea iniciar otra “revolución” dentro de la movilidad eléctrica y planea desarrollar su propio coche eléctrico. Para ello hace algo menos de un año el Instituto Turco de Investigación Científica y el Consejo de Investigación tecnológica iniciaron un proyecto para la producción de vehículos eléctricos asequibles y populares y con carácter marcadamente urbano.
Desde entonces se han recibido unas 20 propuestas por parte de universidades y empresas privadas del país, que han dado como resultado la selección inicial de 10 proyectos, que en los próximos días serán evaluados, de tal forma que al proyecto ganador se le adjudicará, por parte del estado, de un contrato por valor de 33 millones de euros para desarrollar un coche eléctrico y un vehículo con propulsión híbrida.
Para Turquía esto es una oportunidad de industrializar el país con un tipo de vehículos en el que no existe la competitividad que reina en la industria de los vehículos de combustión, además de posicionarse hacia el futuro. Falta saber si la antigua marca Devrim será también utilizada en este caso como la nueva Devrim, la nueva revolución turca.
Vía | Sabah En Motorpasión Futuro | Turquía pondrá en funcionamiento una pequeña flota de autobuses eléctricos en Estambul
