Hace justo un año, la afición de Ferrari vivió el que quizás fuese su mejor momento de toda la temporada. Por encima del doblete conseguido en la primera carrera del año, la victoria conseguida por Fernando Alonso en el Gran Premio de Italia, el de casa tiene un valor especial. Pero para gozo ferrarista, Alonso no estaba sólo en el podio. A la obligada presencia de Stefano Domenicali se sumó Felipe Massa. El brasileño consiguió uno de los últimos buenos resultados de una pobre temporada.
Pero antes de que eso ocurriera, Fernando Alonso consiguió una magnífica pole en la jornada del sábado. Sabíamos que los Red Bull iban a sufrir y así fue. No pudieron conseguir la pole y tampoco pudieron resarcirse en carrera aunque a pesar de ello, la cuarta y sexta posición logradas por Sebastian Vettel y Mark Webber era minimizar daños.
Tras perder la primera posición en la salida, la victoria de Alonso se fraguó en boxes. Una fantástica parada de su equipo le permitió superar a Jenson Button. Por su parte, Lewis Hamilton decía adiós a la carrera en la primera vuelta tras tocarse con Felipe Massa mientras que Mark Webber se enfrascaba en una fantástica remontada tras "liarla" en la salida por enésima vez. Un problema reconocido desde Red Bull y que se está repitiendo también esta temporada.
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