Desde que comenzó con su negocio de venta de música, pocas cosas se han puesto por delante de Richard Branson. El magnate británico es uno de esos hombres emprendedores que ha podido hacer lo que ha querido y casi siempre con éxito.
Su última aventura comenzó el pasado año en la Fórmula 1 con Brawn GP. Un año más tarde, el "pequeño" patrocinio a un equipo campeón se ha convertido en una escudería con su nombre. Una escudería que debuta en 2010 y que a tenor de lo visto en los entrenamientos de pretemporada va a tener unos comienzos en el mundial complicados.
Por razones como esas, Ferrari esta semana se quejó amargamente de las decisiones tomadas por la FIA. La escudería italiana afirmó que las nuevas escuderías están abocadas al fracaso. Comentarios que no han sentado nada bien a Richard Branson.
Ferrari debería darle la bienvenida a los nuevos equipos porque hacen que el deporte sea mucho más emocionante
Esta polémica va a estar a la orden del día este año. Pero quizás el mayor problema, el que ya estamos cansados de mencionar, es que los equipos nuevos entraron con la promesa de un tope presupuestario. Y de esa promesa no queda nada. Ni siquiera Max Mosley.
Una vez se reduzca el presupuesto de los equipos establecidos... entonces veremos más igualdad. En uno o dos años los alcancemos. Creo que los nuevos equipos competirán de tú a tú con Ferrari y creo que harán que el deporte sea más emocionante.
Virgin Racing ha presentado el monoplaza más "revolucionario", al menos en su concepción y tiene el presupuesto más bajo del mundial. Aún así, Branson está convencido de que podrán asomar la cabeza.
Estamos muy emocionados. Empezar este proyecto de cero ha sido un reto apasionante. Competiremos con escuderías que llevan 20, 30 años en el Mundial, y creo que estamos capacitados para llevar a cabo un equipo y un coche muy competitivos
Vía | Sportlifepress
