Victoria de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Azerbaiyán de Fórmula 1 delante de Kimi Raikkonen y Sebastian Vettel tras un emocionante final de carrera. Un accidente entre los dos Red Bull provocó un safety car que ayudó a Valtteri Bottas a mantener la primera posición en la que rodaba, pero un pinchazo a dos vueltas del final, le dejaron fuera de juego.
El Gran Premio de Azerbaiyán quizá sea junto con Mónaco, uno de las carreras en las que los errores se pagan más caros. Los muros están muy cerca y tras lo visto en los entrenamientos libres y clasificación la carrera prometía ser cuanto menos, emocionante.
Con Sebastian Vettel en primera posición, con Lewis Hamilton al acecho se apagaron los semáforos en el circuito urbano de Baku. El de Ferrari conseguía mantener la posición sin mucho esfuerzo mientras que por detrás, el británico hacía lo propio. El único que parecía tener opciones de ganar posiciones en la cabeza de carrera era Valtteri Bottas, que estaba muy cerca de su compañero de equipo pero mantenía posición.
Esteban Ocon superó a Kimi Raikkonen quien no se daba por satisfecho y luchaba por recuperar posición. En una de las maniobras ambos colisionaron. La peor parte se la llevó el de Force India que terminó estrellado contra las protecciones.
Justo por detrás, Nico Hülkenberg trataba de superar a Sergey Sirotkin, que a su vez rodaba en paralelo con Fernando Alonso. El de Renault cerraba la trazada al joven de Williams que colisionó contra el McLaren del asturiano pinchándole los dos neumáticos derechos.
El incidente provocó la salida del safety car que se mantuvo en pista durante seis vueltas. Sirotkin abandonó mientras Alonso luchaba por llegar a boxes con la mitad de su monoplaza rozando el asfalto. Aunque lo consiguió, volvió a pista en posiciones muy retrasadas.
Uno de los que más partido consiguió sacarle a la situación fue Carlos Sainz que ascendió a la sexta posición desde la que, tras la marcha del coche de seguridad, le permitió luchar contra unos Red Bull que no dudaron en batirse entre ellos.
Tras haberse tocado en la salida, Ricciardo y Verstappen volvieron a luchar en pista, lo que permitió al madrileño superar primero al australiano y tras la activación del DRS, al holandés.
Hülkenberg, que venía por detrás, no tardó en llegar y superarles también. Sin embargo, poco después perdió el control de su coche y tras golpear uno de los muros, tuvo que parar el coche en una de las escapatorias y retirarse.
A pesar de que Azerbaiyán no es uno de los circuitos que más desgasta los neumáticos, Sainz tenía que entrar a cambiarlos en la vuelta 16 después de una repentina pérdida de rendimiento. La batalla con su excompañero de equipo le salió cara al de Renault que salió en tráfico por detrás de los dos McLaren. Aunque pudo adelantarlos en pista sin grandes problemas.
Algo similar le sucedió a Hamilton unas vueltas después. En las lonas perdió varias veces el control de su monoplaza antes de que en la vuelta número veintitrés, terminase por parar. A pesar de todo, salió por delante de los dos Red Bull, que seguían luchando entre sí.
La guerra entre los hombres de Chistian Horner no parecía tener fin. Ricciardo no parecía conformarse con rodar detrás de su compañero y a pesar de haber llegado a tocar en un par de ocasiones antes, el australiano no daba su brazo a torcer y lo volvía a intentar una y otra vez.
Mientras, Sebastian Vettel aprovechó para hacer su primera y única parada en boxes lo que cedió la cabeza de carrera a un Valtteri Bottas bastante discreto tras sus primeros metros de Gran Premio.
En vuelta 35, Ricciardo superó finalmente a Verstappen pero el equipo le llamó a boxes justo después. Todo parecía indicar que el australiano mantendría la posición, pero tras la parada de Max, el holandés salía por delante.
Tan solo una vuelta después, volvían a encontrarse y en esta ocasión ambos colisionaron. Ricciardo trató de encontrar el hueco para pasar mientras que Verstappen modificaba su trayectoria sorprendiendo a su compañero que se lo llevó puesto.
Esta acción provocó una nueva salida del coche de seguridad. El mayor beneficiado de ello fue Valtteri Bottas que aún no había parado y que tras montar el ultrablando mantuvo la primera posición por delante de Sebastian Vettel. Tras lo visto en China, todos los pilotos cambiaron de neumáticos para evitar nuevas sorpresas.
Durante el periodo de safety car y a tan solo ocho vueltas del final Romain Grosjean perdió el control de su coche cuando calentaba neumáticos. Esto estiró aún más el periodo de coche de seguridad lo que redujo a tan solo cuatro vueltas del final de la carrera.
En la relanzada, con todos los pilotos muy pegados, Hamilton lo intentaba con Vettel, que a su vez atacó a Bottas. La maniobra le salió cara al piloto de Ferrari que se pasó de frenada lo que le hizo caer a la cuarta posición, detrás de Kimi Raikkonen.
Cuando Valtteri Bottas tenía la victoria al alcance de su mano, su neumático trasero derecho reventó, cendiéndole el liderato a Hamilton y obligándole a abandonar. Vettel también sufría con el plano que le había hecho a su neumático. De hecho, Sergio Pérez le superaba sin grandes problemas para hacerse con la tercera posición del podio.
Finalmente, y tras un final de carrera de locura, Lewis Hamilton conseguía subir a lo más alto del cajón por primera vez esta temporada.
A la alegría de los hombres del podio se sumaba la de Carlos Sainz, en quinta posición, la de Charles Lecrerc, que se estrena en los puntos gracias a una sorprendente sexta posición. Séptimo ha sido un Fernando Alonso que tras haber dañado su coche en el incidente con el Williams, consigue salir de Azerbaiyán con unos importantes puntos de cara al mundial.
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