La trampa de los mild-hybrid: hay coches diésel de alta cilindrada que se consideran 'eco'
Las ciudades se cierran progresivamente al tráfico, especialmente en episodios de alta contaminación. Y en estos casos, los coches más afectados por la prohibición de circular dentro de las ciudades son los coches con motores diésel y gasolina. Sería el caso, por ejemplo, de Madrid en una situación de escenario 4; solo los híbridos (etiqueta ECO) y eléctricos (etiqueta Cero) podrían entrar en la ciudad.
Sin embargo, se da la casualidad de que existen algunos coches diésel (y también gasolina) con etiqueta ECO, gracias a la tecnología de la hibridación ligera de 48V. Así, incluso con un Audi A8 50 TDi de 286 CV podrías entrar en Madrid en un escenario 4 de contaminación gracias a su etiqueta ECO. Y no es el único.
La necesidad para los fabricantes de obtener una media de emisiones de CO2 de 95 g/km para toda su gama en 2020 les ha llevado a centrarse en la creación de coches eléctricos e híbridos enchufables o PHEV, pero también a buscar soluciones imaginativas para poder lograr esa media de emisiones en los coches de combustión interna sin tener que invertir cantidad ingentes en el desarrollo de coches eléctricos y PHEV. Una de ellas y la que más se va a utilizar en la industria es la de la micro hibridación de 48V.
Cómo funciona un coche diésel (o gasolina) mild hybrid
En 2016, ya te explicábamos en detalle qué es la micro hibridación, o mild hybrid, de 48 voltios. (Lo puedes leer en detalle aquí). Simplificando al extremo se trata de un motor de arranque generador o MGU (de sus siglas en inglés, Motor Generator Unit) sobredimensionado y asociado a una batería de 1 kWh (o incluso menos).
El MGU ayuda al motor térmico, mientras que todos los sistemas auxiliares del coche (faros, aire acondicionado, turbo, ABS, etc) funcionan con la energía recuperada y/o generada por el MGU. El motor de combustión interna mueve exclusivamente las ruedas.
El principio es similar al del Honda Insight, el motor generador eléctrico ayuda al térmico pero no mueve directamente las ruedas. La principal diferencia de los sistemas actuales de micro hibridación con respecto a los Honda Insight es su red eléctrica de 48 voltios. Y es que así se optimiza la función start&stop, capaz de apagar el motor a velocidad constante, como en autopista, y volverlo a encenderlo en marcha.
Para los fabricantes, las solución del mild hyrbrid es perfecta, al menos a corto plazo. Según Delphi, que ha desarrollado varios prototipos de mild hybrids, éstos tienen el 70% de las ventajas de los híbridos convencionales por un 30 % de su coste. Es decir, estos sistemas se pueden implementar en coches “tradicionales”, como un diésel.
Un coche diésel mild hybrid se equipará legalmente a un híbrido
Por otra parte, es verdad que el sistema mild hyrbid recuerda mucho al sistema i-ELOOP de Mazda. En los Mazda equipados con i-ELOOP, el coche recupera la energía cinética cuando el conductor frena o levanta el pie del acelerador. La energía se almacena en un condensador y es utilizada para los sistemas auxiliares (climatización, luneta térmica, multimedia, etc). Sin embargo, el motor térmico no se beneficia directamente de esa energía almacenada a diferencia de los mild hybrid.
La gracia de los coches con sistemas mild hybrid es que están homologados en Europa como coches híbridos. Sí, su “motor eléctrico” no mueve las ruedas, pero sí ayuda al térmico a moverlas de manera puntual y permite que el coche pueda circular por autopista con el motor apagado con total seguridad y volver a encenderlo sin que el conductor se dé cuenta. Y esa es la clave de por qué se homologan como híbridos (y no los Mazda equipados con i-ELOOP). Lógicamente, al ser coches híbridos a efectos legales cual Toyota Prius, reciben una etiqueta medioambiental
La oferta de coches mild hybrid no deja de crecer
De momento, pocos son los coches diésel (y gasolina) en el mercado equipados con sistemas mild hybrid, pero cada vez son más. En diésel, por ejemplo, ya están en el mercado los Audi A7 Sportback 50 TDi y Audi A8 50 TDi (ambos equipados con un V6 3.0 litros biturbo de 286 CV) y los Renault Scénic y Grand Scénic 1.5 dCi (115 CV) Hybrid Assist. En breve, el Kia Sportage también equipará un sistema mild hybrid en su versión diésel, prevista para finales de 2018.
En gasolina, de momento, la oferta es algo más variada, con modelos asequibles (como los Suzuki Baleno 1.2 y Swift 1.2 y 1.0 Boosterjet Hybrid), modelos intermedios (Audi A4 y A5 2.0 TFSI 190 CV) y hasta modelos de lujo (Mercedes CLS 450, Mercedes-AMG CLS 53 o Mercedes S 450 4Matic+).
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