Ensamblar los motores a mano es un símbolo de exclusividad al que cada vez más fabricantes recurren para sus mejores modelos. Un motor, un especialista. Hoy vamos a conocer a los cuatro empleados de Nissan que se dedican en exclusiva a ensamblar el motor VR38 del Nissan GT-R.
Se llaman Takumi, una palabra japonesa utilizada para designar a estos cuatro maestros que dominan a la perfección su oficio, la traducción más aproximada sería la de artesano. Montar todos los motores V6 con turbos gemelos que montan los Nissan GT-R tanto de calle como de competición es el trabajo que hacen todos los días, tras el salto os traemos dos vídeos de Nissan donde conoceremos mejor a estos artesanos.
Los Takumi suman entre ellos 100 años de experiencia montando motores. Sus nombres, que van en una placa colocada en el motor son Izumi Shioya, Nobumitsu Gozu, Tsunemi Ooyama y Takumi Kurosawa, el jefe del grupo. Sus historias son bastante diversas, pero es remarcable que el jefe Takumi entrase de rebote en Nissan, tras ver su carrera en el fútbol truncada por una lesión Nissan le ofreció jugar en su equipo corporativo, tras lo que conoció la fábrica de motores de Yokohama.
Como le gustaba lo que vió en la fábrica, pidió unirse a la factoría en la que ahora trabaja junto con sus tres compañeros en una pulcra sala donde cada uno se dedica a sus motores, montando, comprobando y volviendo a comprobar hasta que cada motor queda perfecto. Los ajustes se hacen a mano y se vuelve a comprobar, todo para que el propietario del Nissan GT-R que monte un motor que lleva la chapa con su nombre quede satisfecho con la joya de precisión alojada en el vano motor.
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