Podría haber quedado en un segundo plano entre tanto clásico, pero no fue así. El Campeador recibía su homenaje en la presente edición del Auto Retro de Barcelona, y no hubo asistente al Salón que no se parara por lo menos un par de minutos a disfrutar de esta joya de la historia automovilística de nuestro país.
40 años después de su presentación oficial, y como si se tratara del mismísimo Salón del Automóvil de Barcelona de mayo de 1967, el Artés Campeador estaba expuesto al público en un stand que mucho recordaba a aquel que nos muestran las fotos de la época, con casco y espada del Cid incluidas.
El Campeador es una obra artesanal con un parecido razonable al Ford GT40, nacida de la iniciativa de Jesús Artés de Arcos, conocido también por su Guepardo de F IV o su Gato Montés de 6 ruedas. El Campeador monta un motor de 1.255cc y el doble carburador del Renault 8 Gordini, aunque también podía montar el motor del Seat 1500, el grande de la época. Además, consta de un chasis de estructura autoportante de acero con carrocería monoblock de resina de poliéster con fibra de vidrio.
Un incendio en los Talleres Zipo de Barcelona, en los que se estaba llevando a cabo la construcción del Campeador, hizo que el proyecto inicial fuera abandonado, y sólo quedó para la historia el prototipo que, convenientemente restaurado, se expuso en el Auto Retro por gentileza de la Colección Ramón Magriñá.
