Mercedes-Benz Clase C Cabrio: al volante de este silencioso y cómodo descapotable
Pruebas de coches

Mercedes-Benz Clase C Cabrio: al volante de este silencioso y cómodo descapotable

El próximo mes de septiembre llega a los concesionarios el Mercedes-Benz Clase C Cabriolet, el primer descapotable de la familia C. Aún no se han ofrecido los precios de la gama para el mercado español, aunque la marca alemana asegura que estarán disponibles a finales de este mismo mes. De momento vamos a contarte todos los secretos de este cómodo y silencioso cabrio.

Podemos afirmar que es comfortable y poco ruidoso porque ya hemos tenido oportunidad de ponernos al volante de varias versiones del Mercedes-Benz Clase C Cabrio en carreteras de Italia y Eslovenia, para contarte nuestras primeras impresiones. Te adelantamos que es uno de los descapotables mejor resueltos que hemos probado recientemente. ¿Te subes con nosotros?

Básicamente, este descapotable mantiene las proporciones y dimensiones del Coupé (4,69 metros de largo, 1,81 metros de ancho y 1,41 metros de alto), y lo mismo ocurre con la estética exterior y el habitáculo. En éste último, el aspecto es idéntico, aunque cambian algunos materiales, como las tapicerías de cuero reflectante -opcionales-, especialmente diseñadas para el Cabrio, cuya piel ha de aguantar la intensidad del sol. Por supuesto, la calidad de los materiales es la de siempre, sea cual sea la opción: madera, piel, aluminio, fibra de carbono, etc...

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

También como en el Coupé, para una estética exterior más llamativa se ofrece el kit deportivo AMG Line, con paragolpes específicos, detalles cromados, llantas de 18 pulgadas y un volante de corte deportivo junto a pedalera metálica, por ejemplo. Como en otros modelos de la gama, durante el primer año habrá disponible una edición especial Edition 1, con equipamiento y diseño específico.

Como recordaréis, ya probamos hace unos meses el Mercedes-Benz Clase C Coupé, incluídas variantes AMG en el espectacular circuito de Ascari, pero esta vez, tratándose de un descapotable, una zona de costa europea le viene al pelo, pero antes, empecemos por ver qué versiones se ofrecen.

Motores para todos los gustos

La oferta de motorizaciones para este Clase C cuenta con opciones de 4, 6 u 8 cilindros, tanto gasolina como diésel y tanto de Mercedes-Benz como firmados por el especialista en variantes deportivas de Affalterbach, Mercedes-AMG. Las opciones en el mercado español son dos diésel y cinco de gasolina, de entre 170 y 510 CV, y todos ellos se combinan con una caja manual de seis marchas o con la nueva caja de cambios automática 9G-Tronic, de nueve marchas, salvo las variantes V8 (C 63 y C 63 S), que mantienen el cambio AMG de 7 velocidades.

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

Cilindrada

Nº de Cilindros

Potencia

Par máximo

Consumo medio (l/100km)

0-100 km/h (segundos)

Velocidad Máxima (km/h)

C 220 d 4Matic Cabrio

2.143 cc

4

170 CV

400 Nm

4,5 (5,0)

8,3 (8,1)

231 (225)

C 250 d Cabrio

2.143 cc

4

204 CV

500 Nm

4,6

7,2

243

C 200 4Matic Cabrio

1.991 cc

4

184 CV

300 Nm

6,0 (7,1)

8,2 (8,0)

235 (227)

C 300 Cabrio

1.991 cc

4

245 CV

370 Nm

6,7

6,4

250

C 43 4Matic Cabrio

2.996 cc

6 (V)

367 CV

520 Nm

8,3

4,8

250

C 63 Cabrio

3.982 cc

8 (V)

476 CV

650 Nm

8,9

4,2

250

C 63 S Cabrio

3.982 cc

8 (V)

510 CV

700 Nm

8,9

4,1

250

En las versiones convencionales se ofrece de serie una suspensión mecánica al uso, pero como de costumbre, opcionalmente se ofrecen una suspensión de corte deportivo, con una puesta a punto más firme, y la suspensión neumática Airmatic. Tanto el C 43 como el C 63 tienen suspensión específica, también más rígida, siendo adaptativa en el caso de las dos variantes con motor V8.

Por otro lado, la oferta tecnológica en cuanto a sistemas de asistencia se refiere incluye Attention Assist, Collision Prevention Assist (con aviso de proximidad y frenada automática) y, en opción, Distronic Plus con asistencia en la dirección y Stop&Go Pilot, detección de peatones con frenada de emergencia, asistente de mantenimiento de carril, asistente de aparcamiento con cámara de 360 grados, reconocimiento de señales de tráfico, luces automáticas de carretera...

Nada de incómodas corrientes de aire

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

Como si estuviera preparado por la marca para que pusiéramos a prueba su nuevo cabrio (en realidad es la ley de Murphy la que consigue un tiempo de perros cada vez que se presenta un descapotable), poco después de cruzar la frontera con Eslovenia comienza a llover con ganas y en cuestión de minutos las generosas gotas se convierten en granizo. Ocasión ideal para comprobar que, a diferencia de lo que piensa mucha gente, un modelo de este tipo se puede utilizar todo el año, aunque tengas que ponerle la capota de vez en cuando.

Mercedes-Benz ofrece de serie para este Clase C Cabrio una capota básica de color negro y, en opción, una capota tricapa -la que probamos- que mejora la insonorización y se puede elegir además en tres tonos adicionales : azul marino, granate o marrón. En cualquier caso, el accionamiento de la misma es automático, mediante un botón de la consola, y se pliega o despliega en 20 segundos, incluso en marcha, hasta una velocidad de 50 km/h.

Debido al calor de Trieste no tenemos oportunidad de probar otros sistemas enfocados a un uso durante todo el año, como los reposacabezas con calefacción Airscarf (disponible opcionalmente en casi todos los asientos menos en algunos deportivos de AMG) o los asientos calefactados, aunque los clientes seguro agradecerán estas comodidades para poder utilizar su cabriolet en cualquier circunstancia. Lo que sí probamos son los asientos ventilados, que también están disponibles y son siempre bienvenidos en verano.

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto
Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

Durante el rato que podemos circular descapotados descubrimos que gracias al sistema Aircap, formado por un deflector de aire sobre el parabrisas (efectivo pero poco atractivo estéticamente por el aspecto que da al vehículo al estar desplegado) y otro tras los asientos traseros (ver foto), las molestas corrientes de aire que ocurren en el habitáculo de un descapotable aquí no existen. El sistema está pensado para cuatro ocupantes pero también existe un deflector manual, en opción, ideal si solo somos dos y, según Mercedes-Benz, aún más efectivo.

Con las ventanillas subidas apenas circula aire por el interior del coche si tenemos los deflectores desplegados (accionados automáticamente mediante un botón de la consola) y en vías rápidas a 120 km/h mantener una conversación entre los ocupantes no supone tener que elevar el tono de voz. Además, según nos comenta una compañera de gremio que también está probando el modelo, tampoco te despeinas en exceso teniendo el pelo largo, lo cual es un punto crítico para las mujeres.

Es lógico que un modelo que prescinde de techo convencional a cambio de una capota de lona sea más ruidoso que su equivalente coupé, y en este caso también es así, pero lo cierto es que los niveles de sonoridad que llegan al habitáculo son muy contenidos, incluso en ciudad, donde lo único notable es el ruido del tráfico que tenemos alrededor, que se escucha distante en cualquier caso.

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

Sorprende que con la carretera mojada (y bien mojada) apenas nos llega ruido de rodadura a través de los pasos de rueda. Es probable que en nuestro coche estemos habituados a escuchar claramente el ruido de los neumáticos levantando agua al circular en mojado, pero en este Clase C Cabrio esa sensación apenas existe. Realmente está muy bien insonorizado, aunque sí son audibles, por ejemplo, las gotas de agua -bastante generosas, por cierto- cayendo sobre la capota .

Toma de contacto: C 300, C 250 d y C 43

Durante la presentación nos ponemos al volante de dos variantes convencionales, una gasolina y otra diésel, y la más asequible de las firmadas por Mercedes-AMG, C 43, con el delicioso motor 3.0 V6 biturbo que ya nos encantó en su día cuando lo probamos por primera vez en el Clase C Berlina, cuando estas versiones de acceso a AMG se denominaban aún 450 AMG Sport.

El Mercedes-AMG C 43 4Matic Cabrio es 135 kilogramos más pesado que su equivalente Coupé, aunque a nivel de prestaciones el peso extra apenas se nota: pierde una décima de segundo en la aceleración de 0 a 100 km/h, parando el crono en 4,8 segundos, pero a cambio permite circular con la melena al viento (es un decir, porque si así lo quieres apenas se mueve la melena, aún yendo descapotado).

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

Este C 43 Cabrio tiene un tacto relativamente blando, con una suspensión cómoda y una dirección con no demasiado peso, pero resulta bastante agradable de conducir, tanto "de paseo" como en una conducción más deportiva. El equilibrio es bueno y, en el modo más deportivo o Sport+, la dirección gana algo de peso y el conjunto parece algo más preciso.

Lo mejor de esta versión es su motor V6 biturbo de 367 CV y 520 Nm, cuyo sonido es muy gratificante. Suena muy bien y no en exceso, y la nota de escape es bonita, sin llegar a ser tan espectacular ni estrepitoso como sus hermanos mayores con motor V8 biturbo (C 63 y C 63 S). En los modos deportivos también petardea ligeramente al ahuecar y en los cambios de marcha, pero no se acerca a los V8 en cuanto a estruendo.

Además de por su precioso sonido, que tiene un toque muy racing pero sin ser "macarra", el V6 destaca por lo progresivo que resulta. Por tacto podría hacerte incluso pensar que se trata de un motor atmosférico, puesto que no es explosivo, sino más bien gradual. Eso sí, el turbo permite que el motor esté muy lleno a casi cualquier régimen, desde bajas vueltas hasta las 6.500 RPM donde corta inyección.

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

El cambio 9G-Tronic le va de maravilla al modelo. Permite transiciones entre marchas agradables para circular con comodidad, así como un ahorro de combustible en vías rápidas, pero también es suficientemente rápido para una conducción deportiva. Además, el C 43 ofrece un botón en la consola que permite poner la caja de cambios en modo manual, para que el ordenador no cambie de marcha por nosotros. En algún punto no te deja subir o bajar marcha (por velocidad o RPM), pero nunca te mete una relación indeseada, llegando antes al corte de inyección.

El C 43 Cabrio corre y mucho, aunque la guinda del pastel es la tracción 4Matic, que consigue una motricidad espectacular en cualquier circunstancia, lo cual no puede decirse de los C 63, que cuando las cosas se ponen feas (carretera mojada, por ejemplo), transmitir tanta potencia al asfalto se vuelve una tarea complicada que requiere de tacto y buenas manos para ir rápido.

Por su parte, el motor C 300 de gasolina y 245 CV parece algo descafeinado al lado del V6. No corre tanto (aunque va sobrado para el común de los mortales, a decir verdad) ni tiene un sonido tan racing como el AMG, pero es más cómodo y grato en conducción tranquila, que es precisamente lo que piden las carreteras de costa de esta zona de Italia. Además, esta unidad incluye la suspensión neumática Airmatic, que varía su dureza en función del modo de conducción elegido.

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto

Por último, el C 250 d Cabrio de 204 CV es la opción ideal para los más ahorradores, ya que homologa un consumo de combustible incluso menor que la variante de acceso a la gama diésel (220 d). De 4,6 a 4,9 litros a los cien kilómetros (según neumáticos), frente a los 5 ó 5,3 litros del 220 d de 170 CV. Además, ofrece 500 Nm desde 1.600 RPM, así que fuerza para moverse con agilidad no le falta.

El motor 2.1 litros turbodiésel es un viejo conocido de la gama Mercedes-Benz, que hemos probado en muchas ocasiones, aunque ahora en combinación con la nueva caja 9G-Tronic de nueve marchas. El sonido del propulsor no destaca por ser el más agradable de entre el resto de hermanos, pero la buena insonorización hace que no resulte molesto. Echamos de menos, eso sí, la nueva generación de motores diésel estrenada en el Clase E, más refinados y silenciosos.

En resumen, el Clase C Cabrio sorprende por su buena insonorización, comodidad de marcha, buenas maneras en conducción animada, ausencia de turbulentas corrientes de aire en el interior (gracias a los deflectores) y amplia gama de motores, con opciones para todos los gustos, incluyendo versiones deportivas de altos vuelos.

Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto
Mercedes-Benz Clase C Cabrio, toma de contacto
Los arcos antivuelco están escondidos tras los asientos posteriores y se despliegan automáticamente en caso de accidente con vuelco.

Precios Mercedes-Benz Clase C Cabrio

La siguiente tabla de precios incluye IVA y transporte, pero no promociones ni descuentos.

VERSIÓN

PRECIO

C 220 d

48.200 euros

C 220 d 4MATIC

52.600 euros

C 250 d

55.500 euros

C 220 Cabrio

47.900 euros

C 300 Cabrio

55.800 euros

C 43 4MATIC Cabrio

74.100 euros

C 63 Cabrio

106.300 euros

C 63 S Cabrio

115.700 euros

Los gastos del viaje para esta presentación han sido asumidos por la marca. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas.

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