Poco después de desvelarse el pequeño descapotable que irá a Ginebra, el Renault Wind, vemos ahora el aspecto definitivo de su hermano mayor, el Renault Mégane Coupé-Cabriolet, que comparte denominación con el modelo que reemplaza. Lo veremos también en dicho Salón, empieza a venderse en primavera.
Al igual que la generación previa, tiene un techo duro retráctil, con la salvedad de que ahora es acristalado de serie con una superficie de 0,47 m², según la marca el más amplio del segmento. El plegado y extensión del techo es con un mecanismo electro-hidráulico que completa la operación en 21 segundos, uno menos que antes.
La carrocería es más rígida que antes, un 80% según Renault. El parabrisas está más adelantado para facilitar el acceso al coche. Aseguran que tiene un excelente aislamiento térmico y acústico, eso último lo tengo que comprobar porque el Mégane CC de generación anterior era notablemente ruidoso a más de 100 km/h.
Tiene cuatro plazas. Tras los cabeceros antivuelco traseros tiene un deflector de aire de serie, y opcionalmente puede tener otro deflector que inutiliza las plazas traseras y da confort “a cualquier velocidad”. Con cuatro plazas y deflector aseguran confort hasta 90 km/h, un dato en consonancia con sus rivales.
Su maletero cubida 417 litros en configuración coupé y 211 en cabriolet, suficiente para tres maletas tipo equipaje de cabina de avión. Renault dice que tiene los mejores valores de umbral de carga (altura 590 mm, apertura 258 mm) y dispone de un cierre automático, no hay que cerrarlo ni abrirlo manualmente.
Como siempre, hablamos de una excelente dotación de seguridad en cualquier escalón de equipamiento. Como poco tenemos ABS, control de estabilidad y tracción, sensor de lluvia y luces, regulador/limitador de velocidad, chivatos de abrochado de cinturón, sensor de presión de neumáticos y seis airbags.
Motorizaciones del Mégane Coupé-Cabriolet
Según países, se ofrecen hasta seis motores. En gasolina tenemos un 1.6 110 CV como entrada a la gama, un TCe 130 CV y un 2.0 16v 140 CV. El último motor se asocia sólo a un cambio CVT, que se distingue por su confort pero no por su eficiencia ni su consumo. Este motor lo conocemos del Renault Clio (ver prueba), no lo recomiendo.
La opción más razonable y equilibrar es el TCe de 130 CV. No obstante el motor más potente es diesel, se ofrecen tres escalones de potencia, todos con filtro de partículas: dCi 110, dCi 130 y dCi 160. Todos los motores de gasóleo tienen cambio de seis velocidades, y el primero de todos podrá ser automático.
Y he aquí la novedad, Renault estrena una transmisión de doble embrague que denominan Efficient Dual Clutch, basada en el mismo principio que las DSG/S tronic del grupo VAG o la solución Powerhift de Volvo y Ford. Esta transmisión tiene seis relaciones también. No hay datos de prestaciones ni consumo aún, pero dicen que son similares al manual.
Interior del Mégane Coupé-Cabriolet
Se aprecia una mejora de calidad en los materiales en sintonía con el salto del Mégane II al Mégane III. Comparte elementos con la versión de cinco puertas, aunque los paneles de las puertas son específicos de esta versión y los asientos delanteros tienen mejor sujección lateral.
Se ofrecen tres combinaciones de tapicería: carbono oscuro, beige claro o cuero bitono carbono-rojo, se puede apreciar en la galería al pie de este artículo. Los asientos delanteros tienen memoria, lo cual facilita la vida al conductor cuando introduce pasajeros. Dispone de diversas soluciones tecnológicas ya vistas antes:
Por ejemplo, acceso “manos libres”, freno de estacionamiento eléctrico, climatizador bizona, faros bixenón con iluminación de cruce, instrumentación analógica/digital, sistema de sonido “3D Sound Arkamys”, navegador integrado Carminat TomTom, menú de personalización del coche, etc.
Cuando se desvele el modelo oficialmente ampliaremos esta información.
En Motorpasión | Teaser del Renault Mégane CC
