La angustia que hemos sufrido más de un conductor cuando veíamos que el coche se nos quedaba en reserva sin una gasolinera en varios kilómetros a la redonda se queda en mantillas si la comparamos con lo que deben de sentir los conductores del Infiniti M45 Sedán fabricado entre 2003 y 2004, que se quedan tirados por el camino mientras el coche les dice que hay gasolina de sobra para seguir.
Ahora, la NHTSA anda detrás del problema, después de que se hayan registrado 43 reclamaciones por parte de conductores que detectaron la anomalía en sus modelos y que 26 de ellos se pararan en mitad de la carretera. Los M45 fueron diseñados en la planta que los japoneses tienen en Atsugi sobre la base del Nissan Gloria Y34, cambiándole el motor original V6 por un VK45DE V8 de 340 CV, y se ensambló en la factoría de Tochigi, donde al parecer alguien dejó algo suelto.
En la agencia de tráfico americana aseguran que se ha detectado una tendencia al alza en este tipo de imprecisiones, unas imprecisiones que llevan a un problema de seguridad en la carretera. Ahora determinarán cuáles son el alcance, la frecuencia y las consecuencias de esta anomalía. La investigación afectará a unas 8.100 unidades del Infiniti M45, un premium que no sabe cuándo se le acaba la comida.
Vía | Autoblog
