Para conmemorar la llegada del Año del Dragón que está por venir, Rolls-Royce ha decidido poner a disposición de sus clientes chinos un paquete de personalización inspirado en diseños clásicos orientales. Estos aditamentos afectan tanto al exterior como al interior del vehículo.
Pues bien, para empezar los reposacabezas lucen un bordado, hecho a mano, que utiliza cuatro hilos diferentes, combinables con el color del cuero que haya sido usado en el habitáculo. Por otro lado, el salpicadero del coche lucirá inserciones en la madera, también realizadas a mano.
Estas inserciones se componen básicamente del diseño del dragón y del nombre del vehículo. Lo realmente especial es que el material de que se componen estas inserciones es oro. Es verdad que la cantidad de oro empleada será en realidad muy poca, pero sinceramente, el exceso no tiene límites.
Por último, los ocupantes de la parte trasera disfrutaran de dos cojines auxiliares bordados a mano, que se complementan con unos paneles iluminados mediante luces LED en los que se puede leer “Año del Dragón 2012”. Desde luego el cliente manda, porque es el que paga, y los de Rolls-Royce ya no esconden o disimulan su intención de complacer al que es ya, uno de sus mercados más importantes. No digo que me parezca mal, hay que sobrevivir para poder seguir haciendo joyas rodantes, pero no me imaginaba que iban a llegar a poner letras iluminadas.
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