china

El BYD Seagull es el coche más pequeño de BYD, pero es suficiente para meter miedo a la industria del automóvil de EEUU.

EE.UU. prácticamente cierra sus fronteras a los coches eléctricos chinos.

Algunos consideran que las propuestas de Europa para frenar las marcas chinas no son suficientemente duras como para proteger a nuestra industria.

China fabrica tantos coches que se le ha quedado pequeño el mercado: su producción descontrolada le puede pasar factura en su conquista de occidente.

Tesla marca la agenda de precios de los coches eléctricos de otras marcas, pero también aprietan los llegados desde China. Ambos en la misma dirección: precios más ajustados.

A pesar de los quebraderos de cabeza que han causado los chips, los últimos años han sido de los más rentables para los fabricantes y concesionarios de todo el mundo.

Se estrena con dos versiones: una de tracción trasera con 299 CV y 668 km de autonomía y otra de tracción total, 673 CV y 800 km de autonomía.

El 30% de los coches eléctricos vendidos en 2023, casi 80.000 unidades, se quedan ahora sin ayudas.

El cambio de estrategia es una cuestión de vida o muerte para muchos fabricantes.

Huawei ya firma cinco coches en el mercado chino con su tecnología. Uno de los recién llegados ha cosechado 6.700 reservas en pocas horas.

Lleva dentro un GPS y un temporizador, y no se pude retirar hasta que no se pague la multa de aparcamiento correspondiente.

Empezarán a vender coches chinos y además a fabricarlos en Europa.

Con el automóvil, posiblemente vaya a ser más complicado, pero no imposible.

El U8 puede moverse como un cangrejo, vadear, permanecer a flote hasta 30 minutos y "navegar" a 3 km/h simplemente haciendo girar sus ruedas.

Está basado en Android y ya está a la venta en China.