La ciudad de Ámsterdam está por la labor de sellar un nuevo compromiso con la movilidad eléctrica. No podemos olvidar que los Países Bajos, hasta 2014, han sido el segundo mercado europeo más importante de vehículos eléctricos. Pues bien, las autoridades de la capital han lanzado un plan por el que en una década la flota actual de autobuses de la ciudad va a ser sustituida por autobuses eléctricos.
El máximo responsable del transporte de Ámsterdam, Abdeluheb Choho, lo ha dejado claro, desmarcándose de otras ciudades, diciendo que no se trata de ninguna maniobra simbólica o experimental, que sencillamente van a sustituir todos los autobuses sin tener que pasar por esa fase en la que se prueba, por ejemplo, con cinco coches.
Ahora bien, lo que sí es cierto es que el plan está bastante dilatado en el tiempo. De aquí a 2017 la intención es que existan ya 40 buses eléctricos en la ciudad. Del mismo modo, resulta muy interesante el modo en el que piensan surtir de energía a los vehículos. La compañía local de transportes, GVB, generará la energía eléctrica a partir de paneles solares instalados sobre sus edificios. Dicen tener suficiente espacio como para colocar 2.300 paneles.
Con todo, parece que no se tratará de una inversión demasiado rentable para Ámsterdam si hablamos a corto plazo, teniendo en cuenta que costearán la "pre-jubilación" de muchos de los autobuses actuales. No obstante, como bien sabemos, en cuestión de salud pública, tienen mucho que ganar. Nos resta saber todavía, eso sí, por qué modelos exactos apostarán, y si estos serán 100% eléctricos (y no híbridos), como lo mayoría de medios de comunicación están apuntando a estas alturas.
Vía | Clean Technica
Foto | Dennis Tsang (CC) en Flickr
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