Si hay algo en el que coinciden todos los involucrados en la Fórmula 1 es que no hay acuerdo con respecto al límite presupuestario. Jean Todt aspira un tope de 150 millones de dólares, pero la opinión de los equipos está dividida al respecto y, al no existir unanimidad, el presidente de la FIA deberá apelar a un plan B, ya que no está nada fácil persuadir a tantas personas y a sus variados intereses.
Las discusiones se trancan cuando escuderías como Ferrari, Red Bull, Mercedes AMG y McLaren plantean cifras cercanas a los 220 millones de dólares, cantidad que luce inalcanzable principalmente para Caterham y Marussia, en tanto Lotus, Toro Rosso, Force India y Williams tendrían que realizar sacrificios para aproximarse a ese monto, sobre todo si se aplica como tope por temporada. El tema del presupuesto también se torna espinoso cuando son los motoristas y sus escuderías los que llevan la voz cantante, una situación injusta para los equipos clientes.
En palabras de Jean Todt:
No me siento decepcionado al saber que todos los equipos y el titular de los derechos comerciales no están de acuerdo con el límite en el presupuesto. Un presupuesto limitado aseguraría la supervivencia de algunas escuderías, sin embargo las mejores rechazan la propuesta porque pueden darse el lujo de gastar mucho más que las otras argumentando que el límite atenta contra la libre competencia.
Vía | speedweek
