¿Quién pensaba que en los meses de invierno la Fórmula 1 descansaba? El equipo Ferrari ha comenzado el año con una noticia que afecta de lleno a su gestión y, a largo plazo, a su futuro. Maurizio Arrivabene, jefe del equipo italiano desde 2014, abandona la formación tras lidiar una batalla interna con el director técnico, Mattia Binotto.
Para un equipo como el de Maranello, todo lo que no sea ganar o, como mínimo, estar luchando por el título hasta la última vuelta de la última carrera de cada temporada, es un fracaso. La formación más exitosa de la Fórmula 1 lleva diez años sin conseguir un título y la alta directiva ha debido tomar decisiones importantes.
John Elkann, Presidente de Ferrari y máximo responsable de la empresa desde la muerte de Sergio Marchionne el pasado verano, junto a Louis Camilleri, CEO, han decidido que Arrivabene debe abandonar la escudería para abrir una nueva etapa con el hasta ahora director técnico, Mattia Binotto, que será director deportivo y técnico.
Un comunicado oficial lo ha anunciado hoy por la tarde, aunque desde primera hora de la mañana el diario italiano La Gazzetta dello Sport ya lo daba por hecho. Se sospechaba que la relación entre Arrivabene y Binotto no era buena, con acusaciones directas al departamento técnico por supuesta falta de competitividad del Ferrari.
10 años se sequía pesan demasiado
Maurizio llegó a Ferrari a finales de la desastrosa temporada 2014 y fue el tercer jefe de equipo de aquel año, después de Stefano Domenicali y Marco Mattiacci, que apenas duró unos meses. Inició una nueva era para el equipo, a las órdenes de Sergio Marchionne, y con el recién llegado Sebastian Vettel. Aunque los primeros meses fueron esperanzadores, los resultados esperados no han llegado.
Binotto, que ahora será el responsable de Ferrari tanto en asuntos deportivos como técnicos, lleva en Ferrari desde el año 1995 y es director técnico desde que sustituyó a James Allison en 2016. Junto a Sebastian Vettel y Charles Leclerc luchará desde 2019 en adelante por poner fin a la sequía de 10 años de títulos en Ferrari.
¿Qué pasará en 2019? El coche de la próxima temporada es “made in Binotto” y eso ya debe ser garantía de, como mínimo, estar cerca de Mercedes. Todavía habrá que esperar unos dos meses para saberlo y poco más de un mes -hasta el 15 de febrero- para ver por primera vez el nuevo coche.
